Las acciones, los bonos y el dólar estadounidense cayeron este miércoles a medida que aumentan las preocupaciones sobre el estatus premier de los activos estadounidenses.
El Dow cerró a la baja en 817 puntos, o 1,91 %. El S&P 500, en general, cayó un 1,61 % y el Nasdaq Composite, con un fuerte componente tecnológico, cayó un 1,41 %. Los tres principales índices registraron su peor día en un mes.
Las acciones registraron una fuerte caída y los bonos se liquidaron tras una subasta de bonos del Tesoro a 20 años a la 1 p.m., hora de Miami, que registró una débil demanda y fue “decepcionante”, de acuerdo con Chip Hughey, director gerente de renta fija de Truist Advisory Services.
Aunque los bonos del Tesoro a 20 años suelen acaparar menos atención que los de 10 o 30 años, todas las miradas están puestas en la percepción de los inversionistas sobre los bonos del Tesoro desde que Moody’s rebajó el viernes la calificación de la deuda pública estadounidense.
El Tesoro vendió bonos a 20 años por valor de US$ 16.000 millones, y la subasta se saldó con una rentabilidad del Tesoro a 20 años superior al 5 %, lo que indica que los inversionistas exigen tasas más altas para mantener deuda estadounidense. La subasta se saldó con un rendimiento del 5,047 %, frente al 4,83 % de la última subasta a 20 años, celebrada en febrero.
La débil demanda de bonos del Tesoro de EE.UU. se produce mientras Wall Street ya está preocupado por el potencial de que el “gran y hermoso” proyecto de ley fiscal del presidente Donald Trump aumente el déficit y ejerza presión sobre la carga de la deuda federal en un momento de incertidumbre creciente sobre el estatus de refugio seguro de los activos estadounidenses.
Los rendimientos del Tesoro han subido en los últimos días tras el anuncio de Moody’s el viernes, que despojó a Estados Unidos de su última calificación crediticia perfecta. Los precios de los bonos y los rendimientos cotizan en direcciones opuestas.
El rendimiento del bono del Tesoro a 10 años subió el miércoles al 4,59 %, alcanzando su nivel más alto desde febrero, y el rendimiento del bono del Tesoro a 30 años superó el 5 %, alcanzando su nivel más alto desde 2023.
“Aunque la decisión de Moody’s de rebajar la calificación crediticia soberana de EE.UU. el viernes de Aaa a Aa1 no fue sorprendente, añade atención a los verdaderos problemas en cuestión: el creciente déficit de EE.UU. y la carga de la deuda”, dijo Hughey.
La relación entre la deuda federal y el producto interior bruto (PIB), o el valor total de los bienes y servicios producidos en la economía, fue del 123 % en 2024, frente al 104 % de 2017, de acuerdo con el Departamento del Tesoro.
“Ahora estamos hablando de déficits y una proporción de deuda nacional respecto al PIB que realmente van a ser sin precedentes, excepto por los tiempos recientes de recesión”, dijo anteriormente Alan Auerbach, profesor de Economía en la Universidad de California en Berkeley.
Las acciones estadounidenses venían de una sesión en números rojos. El S&P 500 rompió el martes una racha de seis días de ganancias. Aunque el S&P 500 ha vacilado esta semana, ha subido un 17 % desde su punto más bajo este año después de un fuerte repunte en el último mes.
El Índice de Miedo de Wall Street, el Índice de Volatilidad CBOE, se disparó más del 15 %. El índice del dólar estadounidense, que mide la fortaleza del dólar frente a seis principales monedas extranjeras, cayó un 0,5 %.
Bitcoin se disparó a un récord histórico por encima de US$ 109.400 el miércoles por la mañana antes de recortar ganancias y cotizar alrededor de US$ 107.000. La criptomoneda, que es altamente volátil, ha subido más del 40 % desde que cayó justo por debajo de US$ 75.000 a principios de abril.
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