Un equipo conjunto palestino-israelí, que realizó una película sobre el desalojo de palestinos de sus hogares en la Ribera Occidental ocupada, hizo este domingo una apasionada denuncia de las injusticias a las que se enfrentan los residentes en ese enclave durante su discurso de aceptación del Oscar al mejor documental.
“No Other Land” narra la historia de la continua demolición por parte de las autoridades israelíes de Masafer Yatta, un conjunto de aldeas en las montañas de Hebrón, en la Ribera Occidental, donde Basel Adra, uno de los directores, vive con su familia.
El documental sigue los esfuerzos del gobierno israelí de desalojar por la fuerza a los aldeanos de un terreno que reclama desde 1981 para un campo de tiro e instalaciones de entrenamiento militar. Los espectadores son testigos del derribo del parque infantil local, de la muerte del hermano de Adra a manos de soldados israelíes y de otros ataques de colonos judíos mientras la comunidad intenta sobrevivir.
La película también muestra la conexión humana entre Adra y el otro creador de la película, el periodista israelí Yuval Abraham.
Aunque el rodaje de “No Other Land” terminó antes del ataque de Hamas en octubre de 2023, lo que llevó a Israel a lanzar su guerra en Gaza, los temas del documental son especialmente relevantes en un momento de conflicto exacerbado en Medio Oriente.
Los palestinos de la Ribera Occidental han enfrenatado durante décadas los desalojos y la invasión de colonos judíos. Pero Israel ha intensificado su campaña militar en el territorio, desplazando a unos 40.000 palestinos desde finales de enero, según la ONU, y el ministro de Defensa israelí ha prometido ocupar amplias zonas durante el resto del año.
Las fuerzas israelíes afirman que su objetivo son los grupos militantes palestinos de la Ribera Occidental que han lanzado ataques contra soldados y civiles israelíes. Pero los palestinos y los grupos de defensa de los derechos humanos afirman que el ataque ampliado es cada vez más indiscriminado, que mata a civiles y destruye infraestructuras civiles de una manera que es consistente con el castigo colectivo.
Los cineastas aprovecharon sus discursos de aceptación para destacar los efectos de las campañas militares de Israel en Gaza y la Ribera Occidental ocupada.
Adra dijo que la película “refleja la dura realidad que llevamos décadas sufriendo, una realidad que continúa hasta hoy, y pedimos al mundo que tome medidas concretas para poner fin a esta injusticia”.
Abraham pidió el fin de la “terrible destrucción de Gaza” y la liberación de los rehenes israelíes.
“Hemos creado esta película juntos, palestinos e israelíes, porque juntos nuestras voces son más fuertes”, añadió.
La película ha acumulado varios premios en el último año. Pero, a pesar de la aclamación de la crítica, sus creadores han sido criticados por sus comentarios sobre la guerra de Gaza.
Altos cargos alemanes e israelíes criticaron a Abraham después de que pidiera un alto el fuego al recoger el premio al mejor documental en el Festival Internacional de Cine de Berlín el pasado febrero. Abraham declaró que posteriormente recibió amenazas de muerte.
Adra, padre primerizo, dijo el domingo en su discurso de aceptación del Oscar que espera que su hija no tenga que vivir la vida que yo vivo ahora: siempre angustiada, temiendo las demoliciones de viviendas, la violencia de los colonos y la amenaza de desplazamiento forzoso a la que nos enfrentamos todos los días en Masafer Yatta viviendo bajo la ocupación israelí.
“Cuando miro a Basil, veo a mi hermano, pero no somos iguales”, dijo Abraham. “Vivimos bajo un régimen en el que yo disfruto de libertad bajo la ley civil, y en el que él se rige por leyes militares”.
Tori B Powell, Leah Asmelash, Jeremy Diamond, Abeer Salman and Kareem Khadder de CNN contribuyeron a este reporte.
The-CNN-Wire
™ & © 2025 Cable News Network, Inc., a Warner Bros. Discovery Company. All rights reserved.