Gran Bretaña acelerará el aumento de su gasto de defensa, anunció el martes el primer ministro Keir Starmer, en vísperas de una visita crucial para reunirse con el presidente estadounidense Donald Trump en Washington.
Starmer dijo que aumentará el gasto militar del 2,3% del PIB británico al 2,5% para 2027, y luego nuevamente al 2,6% el año siguiente, mientras se abre una grieta entre Trump y Europa sobre el futuro de la guerra en Ucrania.
“Debemos rechazar cualquier elección falsa entre nuestros aliados, entre un lado u otro del Atlántico. Eso va en contra de nuestra historia, nuestro país y nuestro partido”, dijo Starmer a los miembros del parlamento. Calificó la relación de Gran Bretaña con Estados Unidos como la “alianza bilateral más importante” de su país y dijo: “Esta semana, cuando me reúna con el presidente Trump, seré claro: quiero que esta relación se fortalezca cada vez más”.
Starmer también se ha marcado como meta aumentar el gasto de defensa al 3% en la próxima legislatura, que comenzará a más tardar en 2029, después de las próximas elecciones generales. Ese objetivo final dependerá de las condiciones fiscales del momento, dijo Starmer. Trump ha instado a los países de la OTAN a aumentar su gasto de defensa al 5% y ha dejado claro que Estados Unidos no trabajará para mantener la seguridad de Europa en el futuro.
“Este gobierno iniciará el mayor aumento sostenido del gasto de defensa desde el fin de la Guerra Fría”, dijo Starmer al parlamento al presentar los planes.
El aumento se financiará en parte mediante un recorte del gasto en desarrollo internacional, que pasará del 0,5% del PIB británico al 0,3% en los próximos años, dijo Starmer. “No es un anuncio que me agrade hacer”, dijo Starmer, añadiendo que el aumento de la defensa “sólo puede financiarse mediante decisiones difíciles”.
Las organizaciones benéficas que se verán afectadas por los recortes al gasto de desarrollo internacional dijeron que estaban “conmocionadas” y “aturdidas” por la decisión de Starmer.
WaterAid, una organización benéfica dedicada a proporcionar agua potable y sistemas de agua a los necesitados, calificó la medida como una “cruel traición a las personas que viven en la pobreza en todo el mundo”.
El director ejecutivo de Save The Children UK, Moazzam Malik, dijo en un comunicado que los recortes “harán del mundo un lugar más peligroso para los niños, ahora y en el futuro”.
Y el codirector ejecutivo de ActionAid UK, una organización benéfica que trabaja con mujeres y niñas que viven en la pobreza, calificó los recortes de “temerarios” y escribió en una declaración que “no hay justificación para abandonar una y otra vez a los más marginados del mundo para navegar por los acontecimientos geopolíticos”.
“Esta es una elección política, con consecuencias devastadoras”, dijo Hannah Bond.
El anterior gobierno conservador británico se había fijado como meta alcanzar el 2,5% de gasto en defensa para 2030. Tras ganar las elecciones generales el año pasado, Starmer mantuvo el objetivo, pero se negó a fijar un plazo para alcanzarlo.
“Coraje es lo que nuestra propia era exige de nosotros”, dijo Starmer a los diputados al anunciar el nuevo plazo.
Catherine Nicholls de CNN contribuyó a este informe.
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