(CNN) –– Estados Unidos ya no presiona para revivir una propuesta suya de un cese del fuego entre Israel y Hezbollah luego de que Israel rechazara dicha propuesta. Ahora, dijeron funcionarios estadounidenses a CNN, EE.UU. se enfoca en tratar de dar forma y limitar las operaciones israelíes en el Líbano y contra Irán, en lugar de detener las hostilidades.
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La incapacidad de Estados Unidos para detener la intensa campaña de bombardeos de Israel y la invasión terrestre del Líbano, que mató a más de 1.400 personas en menos de tres semanas y desplazó a más de un millón más, plantea preguntas sobre si el Gobierno de Benjamin Netanyahu está haciendo caso omiso de los llamados de la administración de Joe Biden a una mayor moderación como lo hizo en Gaza, y deja nuevamente a la Casa Blanca con un aspecto ineficaz.
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Según los funcionarios, en el Gobierno de Biden hay cada vez más inquietud por la posibilidad de que lo que Israel prometió que sería una operación limitada pronto se convierta en un conflicto más amplio y prolongado. Los esfuerzos liderados por Estados Unidos para negociar un alto el fuego entre Israel y Hamas también fracasaron.
Al igual que en el caso de Gaza, los funcionarios estadounidenses afirman que Israel inicialmente estaba planeando una incursión terrestre mucho mayor en el Líbano antes de que Estados Unidos lo convenciera de reducirla. Pero también reconocen lo que aprendieron durante el último año: que la influencia de Estados Unidos es limitada cuando se trata de las operaciones militares de Israel.
“No pudimos impedir que tomen medidas, pero al menos podemos intentar darle forma”, le dijo a CNN un alto funcionario estadounidense, quien habló bajo condición de anonimato para describir deliberaciones privadas.
La propuesta de alto el fuego, que Estados Unidos presentó junto con Francia, había pedido una pausa de 21 días en los combates entre Israel y Hezbollah para dar a las partes espacio para trabajar en un acuerdo más amplio para devolver a los civiles israelíes y libaneses a sus hogares en el norte de Israel y el sur del Líbano.
“Apoyamos su capacidad para atacar a combatientes, para degradar la infraestructura de Hezbollah, para degradar la capacidad de Hezbollah, pero somos muy conscientes de las muchas veces en el pasado en que Israel ha participado en lo que parecían operaciones limitadas y se ha quedado en el lugar durante meses o años”, dijo este lunes el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller. “Y en última instancia, ese no es el resultado que queremos ver”.
Altos funcionarios estadounidenses también reconocieron que Estados Unidos tiene una influencia limitada sobre lo que Israel decide hacer contra Irán tras el ataque con misiles de Teherán la semana pasada.
Estados Unidos ha instado a Israel a no intensificar demasiado la ofensiva con un ataque de represalia, dijo el funcionario, pero advirtió que lo que Israel considera un ataque proporcionado puede no estar en línea con lo que el resto del mundo, incluido Estados Unidos, consideraría una respuesta mesurada.
El presidente Joe Biden dijo la semana pasada que no apoyaría que Israel ataque las instalaciones nucleares iraníes, pero no está claro si Estados Unidos logró persuadir a Israel para que retire esa opción de la mesa.
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“La única influencia que tienen los estadounidenses en este momento es convocar al ministro de Defensa a Washington y ganar tiempo”, le dijo el exdiplomático de Israel Alon Pinkas a CNN.
El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, tiene previsto reunirse el miércoles con su homólogo estadounidense, Lloyd Austin, una visita que la administración de Biden espera que le permita ganar tiempo para consultas y planificación antes de que Israel lleve a cabo su prometida represalia contra Irán. Con Gallant en Washington, Pinkas dice que Estados Unidos probablemente crea que Israel esperará para atacar.
“Esto tendría sentido en un juego de simulación de ciencias políticas, no en la política israelí”, dijo Pinkas.
Netanyahu se encontraba en Nueva York cuando Israel ejecutó el monstruoso ataque en Beirut que mató al líder de Hezbollah, Hassan Nasrallah. Un ataque contra Irán, aunque mucho más complicado que atacar a un país vecino, aún podría llevarse a cabo con el ministro de Defensa en el extranjero, dijo Pinkas, especialmente dada la tensa relación entre Netanyahu y Gallant.
Gallant dijo que Israel coordina estrechamente con Estados Unidos mientras se prepara para contraatacar a Irán, pero que Israel en última instancia tomará su propia decisión sobre cómo tomar represalias.
“Todo está sobre la mesa”, le dijo Gallant a CNN el domingo.
“El momento adecuado” para la diplomacia
Estados Unidos todavía quiere que se reanuden las conversaciones de alto el fuego en el Líbano, y los funcionarios estadounidenses siguen creyendo que el conflicto solo puede resolverse diplomáticamente.
“Tendremos consultas regulares con los israelíes, los libaneses y otros sobre el momento adecuado para presionar por ese acuerdo”, dijo este lunes la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre.
Pero “los israelíes tienen que atravesar algunas cosas antes de que podamos retomar esas conversaciones”, dijo un alto funcionario de la administración.
Ese funcionario y otra fuente dijeron que ni siquiera está claro en este momento con quién negociaría Estados Unidos en las conversaciones de un cese del fuego. Nasrallah y otros miembros de la cúpula de Hezbollah están muertos como resultado de las operaciones de Israel en el Líbano. Y aunque un funcionario estadounidense expresó su esperanza de que el gobierno libanés pueda ahora ejercer más control sobre el grupo combatiente, el Estado libanés sufre un vacío de poder similar, al no tener un presidente ni un gabinete plenamente facultado desde octubre de 2022.
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Austin dijo el viernes que cree que el gobierno libanés tiene una oportunidad importante de demostrar “que quiere cuidar de su gente” y desviar el apoyo de Hezbollah, particularmente ahora que la cadena de mando del grupo “realmente ha sido desmantelada a nivel estratégico y operativo”.
Pero la campaña aérea israelí en Beirut podría dificultar que un gobierno libanés funcional emerja de los escombros, señaló uno de los funcionarios.
“Lo que está pasando en Beirut no es lo que deseábamos”, afirmó.
Austin y otros miembros de alto rango del equipo de seguridad nacional de Biden, entre ellos el secretario de Estado Antony Blinken, el jefe del Estado Mayor Conjunto, general CQ Brown, y la directora de Inteligencia Nacional, Avril Haines, se reunieron en la Oficina Oval el 30 de septiembre durante varias horas para hablar sobre la intensificación de las operaciones de Israel en el Líbano. Más temprano ese mismo día, un Biden reacio les dijo a los periodistas que se sentiría “cómodo con que [Israel] detuviera” la campaña en el Líbano que corría el riesgo de tensionar aún más la región. A puertas cerradas, dicen las fuentes, Biden ofreció un apoyo renuente para eliminar la infraestructura de Hezbollah a lo largo de la frontera con Israel y en el sur del Líbano, siempre y cuando las operaciones de Israel siguieran siendo de naturaleza limitada.
Si bien Estados Unidos ha apoyado en general esa estrategia, varios funcionarios, incluido Austin, le expresaron a Israel su preocupación por la mitigación del daño civil en sus ataques aéreos, en particular en el sur de Beirut, una zona densamente poblada donde varios edificios residenciales fueron derribados en las últimas semanas.
“El secretario fue muy claro sobre la importancia de tener en cuenta la seguridad de los civiles al planificar y llevar a cabo operaciones, y eso no ha cambiado”, dijo el lunes el mayor general Patrick Ryder, secretario de prensa del Pentágono, cuando se le preguntó si apoya las operaciones de Israel en Beirut. “Ese sigue siendo un tema de discusión entre [Austin] y el ministro Gallant”.
Israel dice que trabaja para mitigar las bajas civiles y señala que emitió avisos de evacuación a los residentes libaneses en los últimos días antes de realizar operaciones. Pero los equipos de CNN en Beirut descubrieron la semana pasada que muchos ataques israelíes ocurrieron sin previo aviso. Israel también envía órdenes de evacuación por mensaje de texto en mitad de la noche, cuando la mayoría de las personas duerme.
Los funcionarios estadounidenses también están preocupados por las operaciones que Israel ejecuta tan cerca del principal aeropuerto de Beirut, lo que podría amenazar la capacidad de los ciudadanos estadounidenses de salir del país a través de las limitadas opciones comerciales que quedan.
Ryder dijo que Estados Unidos está en conversaciones con Israel sobre el aeropuerto relacionado con la seguridad de los estadounidenses que viven en el país, y el portavoz del Departamento de Estado, Miller, dijo que EE.UU. le “ha dejado claro” a Israel que quiere que las carreteras hacia el aeropuerto de Beirut “sigan funcionando”.
MJ Lee y Alex Marquardt de CNN contribuyeron con este reporte.
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